*El buque alemán pereció en los albores de la Primera Guerra Mundial al ser avistado por el acorazado inglés “HMS Highflyer” en el puerto de la entonces española Villa Cisneros. |
Los restos del buque alemán “Kaiser Guillermo el Grande” han
aparecido en aguas cercanas a Dajla, en el Sáhara Occidental, casi cien años
después de su hundimiento el 26 de agosto de 1914, según anunció el ministerio
marroquí de Cultura.
Tras ser advertido por la asociación local Salam, una misión
del ministerio se trasladó a Dajla (antigua Villa Cisneros) entre los pasados
23 y 29 de septiembre para estudiar si los restos de un gran buque se
correspondían con los del mítico buque alemán, hundido en una batalla con los
ingleses.
Las inmersiones submarinas realizadas durante tres días
permitieron descubrir una inscripción con la W de Wilhem (Guillermo), así como
las típicas ventanas circulares, los pasillos y los camarotes que concuerdan con
los documentos de la época.
La parte del buque encontrada e identificada parece ser la
proa, que se encuentra 23 metros bajo la superficie del mar, y todo permite
pensar que las demás partes podrían hallarse en las inmediaciones, tal vez
ocultas en el fondo marino. Según el ministerio, desde los años 50 del pasado
siglo es leyenda en la región que ahí se hallaba el buque alemán, pero no ha
sido hasta este momento cuando se han podido encontrar los restos.
El “Kaiser Guillermo el Grande” medía 200 metros de largo por
20 de ancho y fue el primero del mundo en tener cuatro chimeneas. Concebido
inicialmente para el tráfico civil, se convirtió más tarde en buque de guerra.
El gran buque pereció en los albores de la Primera Guerra Mundial:
atracado en el puerto de la entonces española Villa Cisneros para repostar
carbón, fue avistado por un buque enemigo, el acorazado inglés “HMS Highflyer”,
con el que se enzarzó en una batalla naval.
Las fuentes inglesas aseguran que el gran barco fue hundido
por fuego enemigo, mientras que los alemanes sostienen que fueron sus hombres
los que lo echaron voluntariamente a pique mediante cargas explosivas ante la
inminencia de su captura.
Sea como fuere, ahora el ministerio marroquí de Cultura ha
anunciado una importante operación de rescate en el lugar “una vez reunidas las
condiciones técnicas y legales y conforme a las disposiciones de la Unesco relativas
al patrimonio subacuático”.
Marruecos administra las aguas del Sáhara Occidental al igual
que el territorio, e incluso firma tratados de pesca para ordenar las capturas
en sus caladeros, pero la soberanía de esas aguas no está reconocida
internacionalmente al encontrarse el territorio entero pendiente de un
referéndum de autodeterminación.
*ABC