El Frente de
los Balcanes fue abierto en 1940 cuando Benito Mussolini (1883-1945) ordenó
invadir el Reino de Grecia. Las campañas fallidas italianas en los Balcanes,
motivaron una respuesta alemana que concluyó con la subyugación de las naciones
balcánicas. La guerra de partisanos en Yugoslavia y Grecia y la campaña del
Ejército Rojo entre 1944 y 1945 cerrarían el telón de este teatro de
operaciones secundario de la Segunda Guerra Mundial.
Las luchas
libradas en los Balcanes durante la Segunda Guerra Mundial pueden dividirse en
dos etapas:
La Campaña del
Eje en los Balcanes: iniciada en octubre de 1940 y concluida en mayo de 1941.
Lucha partisana
en los Balcanes: duraría hasta el fin de la ocupación alemana en 1945.
Una vez que las
potencias del Eje invadieron Yugoslavia en abril de 1941, las zonas de Croacia
que rodean la ciudad de Rijeka fueron ocupadas por el ejército italiano,
preparando el escenario para una insurgencia intensa y sangrienta que duraría
hasta el final de la guerra. Esta actividad incluyó ataques de guerrilla en
posiciones aisladas o columnas de suministro, sabotajes y asesinatos de civiles
que se creía que estaban asociadas con las autoridades alemanas e italianas
Durante la <<batalla
de Rijeka>>, que se efectuó desde abril 16 hasta el 07 de mayo 1945,
entre las unidades del 4° ejército yugoslavo (parte del Ejército Popular de
Liberación y Destacamentos Partisanos de Yugoslavia) y el LXXXXVII Cuerpo del
Ejército alemán en la amplia zona de montañas de Snežnik-Rijeka-Ilirska
Bistrica. El LXXXXVII Cuerpo Alemán fue
rodeado en la zona de Ilirska Bistrica donde capituló el 07 de mayo. 16.000 soldados
y oficiales incluyendo tres generales fueron tomados prisioneros, junto con mucho
del material de guerra que este cuerpo poseía.
El área de Rijeka fue fuertemente fortificada,
incluso antes de la Segunda Guerra Mundial. Esta era la frontera fortificada
entre Italia y Yugoslavia y cuando las tropas yugoslavas comenzaron a acercarse
a la ciudad en abril de 1945, una de las batallas más feroces y más grandes en
esta zona de Europa le siguió. Los 27.000 soldados italianos y alemanes lucharon
tenazmente por detrás de estas fortificaciones rebautizadas
<<Ingridstellung>> (línea Ingrid) por los alemanes. Bajo el mando
del General der Gebirgstruppe Ludwig
Kübler (1889 – 1947) infligieron muchas miles de bajas al ejército de partisanos yugoslavos atacantes, que se vieron
obligados a atacar cuesta arriba contra posiciones bien fortificadas al norte y
al este de la ciudad. En última instancia, los alemanes se vieron obligados a
retirarse. Sin embargo, el intento alemán de romper el cerco al norte-oeste de
la ciudad no tuvo éxito. De los aproximadamente 27.000 alemanes y otras tropas
que se retiraban de la ciudad, 11.000 fueron asesinados (muchos fueron
ejecutados después de rendirse), mientras que los restantes 16.000 fueron
hechos prisioneros. Tropas yugoslavas entraron en Rijeka en 03 de mayo 1945.
Es en este
contexto, que las imágenes que a continuación presentamos, fueron tomadas. Estas
muestran a soldados de la Wehrmacht
siendo ejecutados por partisanos, luego de su rendición. Sucedió en Susak, en la colina 206, conocida también como la
colina Kriz, el 20 de abril de 1945. Este grupo de soldados probablemente se separó
del grueso de su unidad y luego de una tenaz resistencia terminaron
rindiéndose. Unas muertes innecesarias, cuando la guerra estaba a punto de
terminar en Europa (oficialmente el 08 de mayo, esto es 18 días después) sólo para llenar
la cuota de muerte en una despiadada guerra sin cuartel.
*Soldado alemán conversa con sus captores
*Los recién capturados
son registrados
*Los
prisioneros son conducidos por un camino de montaña hacia Susacka Draga
*Imagen de las
fortificaciones de la zona, que eran defendidas por las tropas alemanas en la
montaña
*Los recién capturados
soldados alemanes posando para una fotografía, probablemente para distraerlos
mientras era posicionada la ametralladora con que serían ejecutados. Nótese que
algunos de ellos sonríen a la cámara.
* Ejecutados
*Dos soldados
fueron ejecutados lejos del resto, solo podemos especular la razón, quizás intentando
escapar del destino que les esperaba